13 abril 2013

很多东西 Muchas cosas



Había prometido escribir antes pero no ha habido manera. Con el cambio de casa y todo el rollo creo que hoy es el primer día que tenemos alimento mínimo en casa para poder desayunar y comer, no tenemos nada urgente que haya que arreglar, y los viajes a ikea y a la ferretería han llegado a su fin.
Haré otra entrada con fotos, lo prometo. Pero pocas. Así el que quiera ver más, tendrá que visitarla :)
Este post debía llamarse la normalidad de las cosas extrañas, pero como cierto bajista nos envió un titulo similar de un artículo hablando de Pekín, lo he modificado un poco.
Es verdad que es un país extraño, al menos para nosotros, visto desde occidente, hay muchas cosas de China que crujen. Y perdón porque quiero tirarme el moco, hablo de Beijing, que es un microcosmos gigante en sí mismo. Hablar generalidades de China es arriesgado, es demasiado grande, es demasiado diferente y hay demasiada gente (gran excusa utilizada para casi todo lo que funciona mal por aquí por cierto).


En cualquier caso, aunque me vaya acostumbrando... aquí hay mucho que contar, y muchísimo por descubrir. Tengo fotos para que lo vayais viendo, para que no penseis que estoy majara. Porque creo que hay algunas cosas a las que mi cabeza ya se ha acostumbrado y las ha interiorizado como corrientes. Pero con otras sigo alucinando. Vamos por orden.

1. Los churros. Entre millones de tiendas de venta de objetos dispares, por la zona de Nanlouguxian y alrededores hay puestecillos de churros. No he tenido el placer de probarlos, según me han dicho la pasta no es muy buena, no los rocían con azúcar y el chocolate en el que se mojan es el tipico sirope de helado, que eso menos a chocolate puede saber a cualquier cosa. Es cierto que aquí no abunda el chocolate y es algo que hecho de menos. Tenemos un super Dia relativamente cerca que tiene una pequeña sección de productos españoles. Pero no cubren nuestras necesidades de aceite de oliva, queso y aceitunas, las otras tres cosas por las que mi estómago pregunta de vez en cuando. Por cierto, siguen teniendo polvorones, entiendo que para continuar la tendencia China de mantener el espumillón y los santa claus durante todo el año. Los puestecillos de churros en cuestión:


2. Chinos que se parecen a mi padre. No son muchos, pero algunos me recuerdan más que bastante. Mi progenitor dice que no tienen nada que ver con él. Pero yo creo que la historia que me contaron de pequeña de que tengo una tatarabuela Cubana es mentira. Era china seguro. Sino, los que conoceís a mi padre, a ver como explicais esto (es de una revista):



3. Alimentos extraños. Ayer compramos las verduras más raras del supermecado. Para hacer un alijo de congelados caso de que la gripe aviar se ponga fea, que parece ser que esto en 2003 fue la locura, pero también para probar probar y probar. Entre los decubrimientos de ayer, la fanta de... melon o melocotón, o algo así. Hay un montón de bebidas chinas extrañas que iré experimentando, pero empezar por los sabores raros de Fanta, algo divertido vayas donde vayas, me parecía lo más sencillo. Aquí la teneis:


4. Profesiones extrañas. No será la primera ni la última vez que hable de esto. Porque hay de todo. aquí teneis dos. El señor de los gusanitos, en primer lugar. Este es un hombre que lleva un monton de, llamemosle gusanitos gordos tipo Aspitos, en un carro (no excesivamente limpio por supuesto) y los calienta, o los moja, o qué se yo y les da formas. quizá lo más gracioso es ver luego a la gente intentando comerlo.




En el top2 tenemos al ingeniero informatico de multisupermecado chino (organizado temáticamente por plantas, son colmenas de comercios, con todos los productos apilados de techo a suelo, donde hay que regatear (y mas si eres occidental). Aquí teneis al figura arreglando una placa base con un trapo.


5. Señores con globos. Serán probablemente objeto de retrato del siguiente óleo cuando termine el que tengo entre manos. Son un punto de color brillante en una ciudad gris. No llevan muchos, no tiene una táctica de venta agresiva, más bien totalmente pasiva, y suelen ser gente muy humilde. No entran en la categoría anterior, son una especie aparte.




6. Mención especial a la tienda de Doraemon, que tiene absolutamente todo el merchandaising del gato cósmico. Hasta unas réplicas en madera de los gorrocópteros.


7. Para ir acabando, algunas fotos de los alrededores de casa. Las primeras son la zona real, que pensareis que es una barriada gitana pero no es así. Es el antiguo Pekín que se extendía alrededor de la ciudad prohibida, condenado a desaparecer en muchas zonas, por la construcción de bloques y de autopistas, o demolido y construido de nuevo. Esto podeis verlo en las dos últimas fotos. Zonas de Hutones nuevas a las que las han plantado un río fake que se comunica con Houhai. Como dije, más fotos del barrio y de casa en próximas ediciones.

















Ahora que todo está empezando a florecer, los polvorientos y grises Hutones empiezan a despertar del letargo del invierno. Y empieza lo bueno. Las terrazas!!! 
Iba a despedirme de la manera tradicional, pero dada la gripe aviar, cambiaremos a...
Hasta luego chatos!!!

P.D.(ah, y quien quiere un arquitecto en su vida cuando ves, que cualquier chino es capaz de construirse su propia casa? no os pongais tiquismiquis, lo de los ladrillos torcidos es arte, no defecto de construcción!!)